Voy a poner dos que salieron en el primer club y que había interés en leer.
El retrato de Dorian Grey, de Oscar Wilde
Wilde tenía la capacidad de meterse dentro del alma de las personas. Sus personajes, reales, animados o fantasmales, están cargados de "verdad", de la esencia de lo que estamos formados cada uno de nosotros mismos. Leyendo sus historias, tenemos la oportunidad de conocemos un poquito más, de averiguar por qué somos como somos, por qué reaccionamos como lo hacemos. Leer a Wilde es aprender. Aprender a vivir, a través de los ojos de alguien que vivió con intensidad y que luchó toda su vida por encontrar el sentido final de todo. "Escribí cuando no conocía la vida. Ahora que entiendo su significado, ya no tengo que escribir. La vida no puede escribirse; sólo puede oioirse", comentó en sus últimos tiempos. En 1891 escribe su única novela, El retrato de Dorian Gray, en dónde podemos encontrar la ironía, el ingenio, la elegancia y la estética que serán claves en el éxito de sus obras venideras. No existen libros morales o inmorales. Los libros están bien escritos o están mal escritos.Eso es todo.
Ready player one, de Ernest Cline
Estamos en el año 2044 y, como el resto de la humanidad, Wade Watts prefiere mil veces el videojuego de OASIS al cada vez más sombrío mundo real. Se asegura que esconde las diabólicas piezas de un rompecabezas cuya resolución conduce a una fortuna incalculable. Las claves del enigma están basadas en la cultura de finales del siglo XX y, durante años, millones de humanos han intentado dar con ellas, sin éxito. De repente, Wade logra resolver el primer rompecabezas del premio, y, a partir de ese momento, debe competir contra miles de jugadores para conseguir el trofeo. La única forma de sobrevivir es ganar; pero para hacerlo tendrá que abandonar su existencia virtual y enfrentarse a la vida y al amor en el mundo real, del que siempre ha intentado escapar.